Este diario logró establecer el nombre de la nueva jefe de esta cartera, luego de que la semana pasada se conociera de la aceptación de la renuncia de Óscar Giovanni Ramírez Zárate.
Desde la semana pasada el nombre Luz Stella Amaya Romero estaba sonando dentro de las opciones del alcalde del cercado fuerte al final de la llanura, Guillermo Eduardo Aldana Dimas, pero a raíz de que la hoy secretaria de gobierno estaba encargada de algunos asuntos en la Secretaría de Tránsito, no había podido confirmarse que ella sería finalmente nombrada, al ser la de mayor confianza del burgomaestre para desarrollar los proyectos que quedan en desarrollo en la cartera que abandona Ramírez Zárate.
UN NUEVO NOMBRAMIENTO
Amaya Romero, quien es abogada con una
especialización, es funcionaria de carrera de la Alcaldía desde abril 05 de
2013 en el cargo de profesional universitario y antes de ser ascendida por el
hoy alcalde a secretaria Privada, desempeñaba labores en la Secretaria de
Gobierno, la cartera en la que mañana será nombrada como titular.
Desde 2009 a 2012 estuvo trabajando en
la empresa de Acueducto como abogada asesora, ocupó el cargo de personera de
Bojacá desde enero 5 a febrero 27 de 2009, fue profesional universitario de la
Alcaldía de Facatativá entre 2001 a 2008, contratista del Hospital San Rafael de
Facatativá de abril 21 a diciembre 21 de 1999, inspectora de Policía en El
Rosal de junio 11 a septiembre 2 de 1998 y contratista del Instituto Penitenciario
y Carcelario (Inpec) de agosto 29 a diciembre 29 de 1997.
Al ser consultada por El Observador
Siglo XXI, Amaya Romero confirmó la noticia indicando que la posesión como
secretaria de Gobierno se realizará el día de mañana. En cuanto a expectativas,
expresó concretamente que “tiene bastantes”, como poder hacer presencia
efectiva en el municipio y atender los requerimientos de la comunidad.
¿UNA NUEVA VACANTE?
Lo que no pudo indicar la nueva
secretaria de Gobierno, fue quien será su reemplazo al frente de la Secretaría
Privada, cartera que abandona sin ningún mérito más que haber respondido a la
confianza del alcalde mientras ejerció su labor, pues esta cartera no tiene
metas en el plan de desarrollo y tampoco hace parte del interés de los
concejales al realizar control político.
Mientras que ocupó la cartera, la
abogada se caracterizó por ser quien instalaba las sesiones del Concejo Municipal
a las cuales no acudía el alcalde y ocupó en ciertos momentos, por encargos,
otras carteras, como la de Salud, de la cual estuvo al frente luego de la
renuncia del médico Carlos Antonio Casasbuenas Castillo.
En aquella ocasión, se negó a dar a este diario cifras
sobre los protocolos de bioseguridad aprobados a los establecimientos
comerciales aduciendo que se pedía información protegida por la ley, pero no
indicó, como dice la Ley 1755 de 2015, las causales específicas a las cuales
hacía referencia para negar la información.
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