Gracias al acompañamiento de la Policía de Carabineros de Fusagasugá se adelantaron los operativos de control a tenencia ilegal de fauna y flora. Encontrando frente al caso de fauna, estas especies que permanecían en las instalaciones recreativas de un establecimiento comercial conocido en la zona para exhibición del público, especialmente de turistas que confluyen en este sitio.
Esta especie silvestre, que permanecía en condiciones diferentes a las naturales, hace parte de una clase de los roedores de la familia de los cávidos, de ahí que sea considerado el roedor viviente de mayor tamaño y peso del mundo, su hábitat está determinado por grupos o manadas en regiones de climas tropicales y templados siempre cerca del agua, pueden crecer hasta 1,30 m de largo y llegar a pesar 65 kg.
El ingeniero a cargo de flora y fauna de la CAR durante el hallazgo señaló: “Se le hizo saber al dueño del establecimiento que estas especies son consideradas silvestres pues son animales nativos de determinado sitio; de tal forma que constituyen el patrimonio natural de un ecosistema particularmente de los llanos orientales, y no pueden tenerlos en este predio”
El personal de la Policía y la Autoridad Ambiental que registraron el decomiso, señalaron además, que los propietarios conocen la ilegalidad de esta tenencia, pero que al no tener un control sobre la especie; esta se fue reproduciendo y en consecuencia hoy son 14 Chigüiros, los que deberán iniciar en coordinación y asesoría de la fundación Bioandina, un proceso de recogida y traslado de todos los animales, que por su tamaño y número requieren un tratamiento especial, para determinar de ser posible, su reubicación en los llanos orientales.
La tenencia de estos animales representa graves sanciones, las cuales, en este caso, entrarán a revisarse y se establecerán los responsables, de acuerdo a la Ley 1333 de 2009 aplicable para los casos en los cuales una persona tenga en su poder fauna silvestre, se ordena de inmediato la “Restitución de los especímenes de especies silvestres” pues estas pertenecen al estado y su tenencia afecta las disposiciones ambientales que se establecen en esta materia.
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