En las últimas horas el hombre durante ocho días andaba en la búsqueda de su padre por la calles de Facatativá, logró por fin reencontrarse con él. A través de las redes anunció el feliz suceso.
Durante más de una semana David Olaya anduvo buscando a su padre, a quién vio por última vez a pocos metros de la puerta de la Casa de la Cultura "Abelardo Forero Benavides", cuando lo acompañó a coger el bus que lo llevaría a casa en el Barrio Zambrano, luego de que se tomaran un tinto.
David Olaya, quien tiene el mismo nombre de su padre, contó en la mañana de hoy a este medio, que su padre le había contado que había discutido con su actual pareja "pero yo lo he visto desde el primer momento como un incidente normal de cualquier pareja", dijo Olaya hijo, quien durante la semana recibió cerca de 30 llamadas a su teléfono celular, que le indicaban que lo veían por los lados del centro de Facatativá, e incluso que llegaron a verlo en otros municipios de la Provincia del Gualivá.
El señor Olaya padre, es un reconocido comerciante que tiene un negocio para logística recreativa de eventos, ubicada en frente del polideportivo del Barrio Zambrano, donde se ofrecen bombas, confetis y artículos relacionados, por lo que su desaparición causó bastante preocupación entre los suyos, además porque Olaya padre cuenta 75 años, a pesar de verse de menor edad.
Olaya hijo por su parte anunció el feliz reencuentro con su padre a través de su cuenta de Facebook, diciendo lo siguiente:
MIL Y MIL GRACIAS
Gracias a cada persona que nos ayudó a compatir en las redes, al CTI, Fiscalía, a las redes de inteligencia en cada municipio donde existe bomberos, redes de hoteleros, taxistas, gracias mi padre ya APARECIÓ.
Los motivos del porqué, del donde, o del q paso?serán motivos de análisis por parte de la Fiscalía y los resultados serán de privacidad de la familia.
Muchas de verdad gracias por tanto despliegue de uds los ciudadanos fue por ello q (Sic) se ubicó.
De ser posible compartan esta buena noticia, mil gracias. Con aprecio
EL OBSERVADOR SIGLO XXI, se permite unirse al sentimiento de alegría de la familia que por fin tiene la dicha de reencontrase con su querido ser, luego de la incesante búsqueda.
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