Hace un año, apenas estaba empezando la ola de la variante ómicron del Covid19, la cual trajo consigo un vertiginoso aumento del número de casos y muertes, pero hoy el mundo debe prepararse para nuevas pandemias.
Desde el máximo alcanzado a finales de enero, el número de muertes por Covid19 registradas semanalmente ha caído en casi un 90 por ciento. Sin embargo, sigue habiendo aún demasiadas incertidumbres y deficiencias para poder decir que la pandemia ha terminado y, en su lugar, sea necesario preparase para nuevos eventos de gran magnitud.
LAS DIFICULTADES MUNDIALES
Tomando como base la evaluación de la
respuesta de la pandemia más reciente, los deficientes niveles de vigilancia,
de realización de pruebas y de secuenciación impiden a las autoridades
sanitarias conocer con suficiente precisión el modo en que el virus está
cambiando.
Los deficientes niveles de vacunación
exponen a millones de personas a un elevado riesgo de enfermedad grave y muerte
lo que, sumado al deficiente conocimiento de la humanidad sobre la afección
pos-Covid19, imposibilita dispensar un tratamiento idóneo a quienes sufren las
consecuencias a largo plazo de la infección.
Según las cifras más recientes, los cinco
países con las cifras más altas son Estados Unidos con 101 603 695 casos y 1
107 013 muertes, seguido de India con 44 682 160 casos y 530 726 muertes, Francia
con 39 475 983 casos y 163 315 muertes, Alemania con 37 594 526 casos y 163 625
muertes, y Brasil con 36 597 935 casos y 695 236 muertes.
PREPARACIÓN ANTE UNA NUEVA PANDEMIA
La Organización Mundial de la Salud (OMS)
ha seguido insistiendo en la importancia de aprender de esta pandemia para que
la próxima nos encuentre mejor preparados.
En ese sentido, la creación del nuevo
fondo contra las pandemias en septiembre h sido señalado como un paso
importante en la buena dirección, al igual que lo es la creación en Sudáfrica de
un Centro de transferencia de tecnología de ARNm, que aportará a los países de
renta baja y renta mediana los conocimientos técnicos necesarios para producir
rápidamente sus propias vacunas de ARNm.
Un tercer paso es el compromiso de los
países de negociar un acuerdo jurídicamente vinculante de preparación y
respuesta frente a las pandemias. En febrero de 2023 los Estados Miembros
empezarán a debatir sobre un borrador preliminar.
Viruela símica: Nueva emergencia de salud pública
En julio, la OMS declaró la viruela símica
emergencia de salud pública de importancia internacional. La enfermedad, otrora
localizada principalmente en África central y occidental, ha causado este año
más de 83 000 casos en 110 países, según los datos notificados. Afortunadamente,
la tasa de mortalidad se ha mantenido baja con 66 muertes.
Al igual que ha ocurrido con la Covid19,
desde el momento del pico el número de casos de viruela símica comunicados
semanalmente ha caído en más de un 90 por ciento. De proseguir la tendencia
actual, cabe esperar que el año que viene podamos declarar el fin de esta
emergencia.
Ébola: Nuevo brote en Uganda
En septiembre, Uganda declaró un nuevo
brote de ébola (en inglés), causado por la especie de ebolavirus del Sudán, que
llevaba 10 años sin ser notificada en el país.
La respuesta del Gobierno de Uganda para detectar casos, tratar a los enfermos y movilizar a las comunidades para que ayuden a contener el brote está surtiendo efecto: ya ha empezado ahora la cuenta atrás para llegar al final del brote en Uganda.
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