Se trata de cuatro líderes comprometidos con la defensa de
los derechos humanos en Colombia y que fueron reconocidos en septiembre de 2017
al recibir el Premio Nacional a la Defensa de los Derechos Humanos en Colombia
gracias a su valiosa y legítima labor.
De la delegación harán parte Angélica Ortiz, integrante de
la Fuerza de Mujeres Wayuú, Iván Madero de la Corporación para la Defensa de
los Derechos Humanos – CREDHOS, Enrique Chimonja Coy, quien hace parte de la
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz y Socorro Aceros Bautista, lideresa
comunitaria del departamento de Arauca. La visita será entre el 12 y 17 de febrero y estará
acompañada por el Programa Colombia de Diakonia y la Iglesia Sueca, ambos
otorgantes del Premio.
PESE AL ACUERDO DE PAZ, LA SITUACIÓN ES PREOCUPANTE
Luego de catorce meses de la firma de los acuerdos de paz
para ponerle fin al conflicto armado entre el Gobierno Nacional y las FARC,
diferentes organizaciones encargadas de documentar casos de agresiones contra
defensores documentaron cerca de 194 ataques contra defensores y líderes
sociales en el territorio colombiano.
La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos
en Colombia por su parte reportó a diciembre de 2017 que 105 de los homicidios
documentados por la entidad, 73 fueron contra líderes y defensores,
principalmente en las regiones que fueron dejadas por las FARC luego del
proceso de desarme.
Con respecto a 2017 el Programa Somos Defensores reportó un
incremento de 20% en comparación con 2016 en atentados contra defensores y dijo
que, si bien con la firma de los acuerdos se vio reflejado la disminución de
las cifras de víctimas en razón del conflicto, es preocupante que quienes más
han aportado a la construcción de la paz sean ahora la víctimas de este tipo de
ataques.
Aunque las cifras pueden variar de un informe a otro, todos
ellos coinciden en señalar que la persecución responde a un plan sistemático
dirigido contra líderes comunales, comunitarios y campesinos dedicados a
defender la tierra y el territorio, a la erradicación y sustitución de cultivos
de coca, así como a la protección del medio ambiente.
LA AGENDA EN WASHINGTON D.C.
Para los defensores que fueron premiados en 2017 es de
vital importancia poder exponer esta situación en escenarios internacionales
como es la ciudad de Washington DC, en donde tendrán un evento público
organizado por el Instituto de Paz de los Estados Unidos, reuniones con
miembros del Departamento de Estado, la OEA y parlamentarios de dicho país. Así
mismo con la Oficina de Democracia, Derechos Humanos y Trabajo (DRL) y el
Centro de Recursos Empresariales y Derechos Humanos.
De igual manera tendrán la oportunidad de presentar sus
propuesta e ideas para mejorar la situación de derechos humanos, buscando que
tanto el gobierno norteamericano como congresistas y empresas con presencia en
Colombia, propicien el respeto a los derechos humanos y consoliden su apoyo al
proceso de paz.
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